Intenciones del Santo Padre Benedicto XVI para el mes de Septiembre 2011

PAPA FRANCISCO

Queridos hermanos y hermanas:

Hoy comenzamos de nuevo con las catequesis del Año de la fe, reflexionando sobre la resurrección de Jesús. ¿Cómo se ha transmitido esta verdad de fe? En las Escrituras encontramos dos tipos de testimonios al respecto: el primero, las breves fórmulas como la que hemos escuchado en la lectura del Apóstol, que indican con concisión el núcleo de la fe: la pasión, muerte y resurrección del Señor. El segundo, las narraciones que relatan el acontecimiento. Es significativo el hecho de que sean mujeres, que según la ley no podían dar un testimonio fiable, las primeras en anunciar la resurrección. Dios no las elige con criterios humanos sino que mira a su corazón. Su experiencia parte del amor, que las mueve a acudir al sepulcro, y que las hace capaces de acoger el signo de la tumba vacía y el anuncio del mensajero de Dios, y trasmitirlo, pues la alegría y la esperanza que las invade no se puede contener.

Audiencia General 03 de abril del 2013.



viernes, 28 de mayo de 2010

María, un ≤Si≥ al Señor revestido de dignidad


La Anunciación 
Autor: Fra Angelico.
Museo del Prado - Madrid.


Con la respuesta dada por María al ángel en el momento de la encanación:


≤Realmente "el verbo se hizo carne" (Jn, 1,14). De esta manera María alcanza tal unión con Dios que supera todas las expectativas del espíritu humano (1). En tal modo "la plenitud de los tiempos" manifiesta la extraordinaria dignidad de la "mujer". Esta dignidad consiste en parte,en la elevación sobrenatural a la unión con Dios en Jesucristo, que determina la finalidad tan profunda de la existencia de cada hombre tanto sobre la tierra como en la eternidad (2).


Desde ese momento del ≤Si ≥ " de María al Señor, se convierte también en madre de toda la humanidad y en ejemplo de dgnidad. Esta dignidad se hace evidente y es respetada tanto por Dios como por María. Por Dios porque Él no le impone ser la madre de su Hijo, Él envía a su mensajero ante María para hacerle la propuesta y espera una respuesta dada libremente por ella. Por su parte, María, responde con fe pero también con libertad y se somete a la voluntad de Dios con todas las consecuencias, que en ese momento, esa respuesta iplicaba para ella.

≤Mediante una respuesta desde la fe, María expresa al mismo tiempo su libre voluntad y, por consiguiente, la participación plena del Yo personal y femenino en el hecho de la encarnación [...]. Toda la acción de Dios en la historia de los hombres respeta siempre la libre voluntad del "Yo" humano. Lo mismo acontece en la anunciación de Nazareth≥ (3).

A partir del texto expuesto precedentemente es de destacar que en el evento de la anunciación de Nazareth, en la respuesta dada por María al Señor, están contenidos; razón, voluntad y libertad, elementos que están incluidos en el concepto de dignidad humana y que deben estar presentes en una acción llevada a cabo haciendo uso de nuestra dignidad.

Además de la fe, esta respuesta contiene también el coraje que da la misma fe para poder seguir los caminos que Dios directamente o a través de sus mensajeros nos propone.

Con esta respuesta María nos da también un ejemplo de valentía, pero de una valentía revestida de senzatez ya que proviene de la certeza de que está haciedo la voluntad de Dios.

El ≤Si≥ de María no se quedó solo en el momento de la anunciación y encarnación, sino que continuó a lo largo de toda su vida y fue siempre un ≤Si ≥ revestido de dignidad y que involucraba toda su persona y todas sus acciónes. Un ≤Si≥ que la llevó a atravesar por diversas dificultades sin que estas lograran hacerla perder ni su serenidad ni su fe que mantuvo firme aun al pie de la cruz cuando acompañó a su hijo y que se renovó y se fortaleció después de la resurrección y ascención al cielo de Jesús, cuando se nos mostró, a través de estos dos eventos, lo que para nosotros es una promesa y una esperanza, la resurrección de la carne y la vida eterna.

María, una mujer discreta y prudente con dominio de sí misma. Una mujer equilibrada porque una relación intima y autentica con Dios llevan a la persona a un profundo equilibrio interior, a un mantener la calma aun en los momentos más desesperantes, a un darse a los demás aun cuando se tenga la necesidad de ser asistido, a un tratar de mitigar y solventar las injusticias que se cometen con los demás aun cuando en la propia vida y en la de los seres queridos ocurren hechos injustos. Una mujer como la querida por Dios al principio de la creación.

Al contemplar a la mujer perfecta que es María, el resto de las mujeres podemos preguntarnos: ¿En qué y cuánto nos parecemos a ella?, ¿Somos mujeres de fe o nuestra vida está guiada por otros dioses distintos al de María?, ¿Podemos decir que el modelo y el ejemplo de mujer por el que nos regimos es María o este modelo nos resulta anticuado y aburrido?, ¿Los momentos difíciles los afrontamos con dignidad y en unión con Dios o escapamos de ellos?, ¿Cuántos Si le hemos dado al Señor?

Esther María Iannuzzo.


(1) Cfr. JUAN PABLO II, Mulieris Dignitatem, N. 3.

(2) Cfr. Ibid. N. 4.

(3) Cfr. Ibid. N. 4.

jueves, 27 de mayo de 2010

Y Dios los creó Hombre y Mujer…


Hay quienes sin saber el trasfondo, el por qué algunos gobiernos han aprobado y otros pretenden legalizar las uniones entre homosexuales y además llamarlas “matrimonio”. Hay otros, algunos incluso católicos, que opinan que la iglesia se debe modernizar e ir de acuerdo con los tiempos y aceptar tales uniones o “matrimonios” entre homosexuales y, además, permitirles la adopción de niños, considerándolos como derechos de los homosexuales.

Parece que hemos olvidado nuestra primera clase de catecismo en la que se hablaba de la creación y se nos decía que Dios al principio había creado al hombre y a la mujer, mujer y hombre los creó (Gn, 1,27) para que dominarán la tierra y la poblaran. Esto, sigue siendo igual, no ha habido otra creación, ni Dios se nos ha aparecido para decirnos que existe un nuevo género dentro de la raza humana o que se le olvidó decirnos al principio que si queríamos podíamos cambiar de género o asumir el rol y la función del género contrario al que pertenecemos.

Hoy después de varios siglos los niños católicos siguen aprendiendo que Dios los creó hombre y mujer. ¿Qué pasó?, ¿por qué a muchos se les ha olvidado está lección tan básica?... Una cosa es no rechazar ni tratar mal a una persona, independientemente la causa de su homosexualidad o por su tendencia hacia la homosexualidad, y otra cosa muy distinta es apoyar una conducta inmoral que atenta contra la naturaleza del ser humano. Eso no es ni compasión, ni amor, ni amistad. El verdadero amor y la verdadera amistad deben llevar a hablar con claridad, a apoyar a la persona que sufre esa condición a salir de ella, en los casos en que la homosexualidad es curable, siempre y cuando la persona quiera salir de esa situación. Y en los casos en que no es curable porque existe una tendencia natural de la cual no se ha descubierto su causa, apoyar a la persona para hacerle más llevadero su sufrimiento y apoyarle para que no caiga en pecado.

Existe una diferencia entre el ser y el obrar de las plantas y los animales irracionales y el ser y el obrar del hombre que es un ser racional. Entre el ser y el obrar de las plantas y los animales no existe ninguna interposición ni ninguna distancia, es decir, ellos siempre obran obedeciendo a su naturaleza. El árbol de manzanas siempre da manzanas, el no se empeña en dar peras. El perro siempre ladra y actúa como perro y para aparearse siempre lo hace con una perra.

Entre el ser y el obrar del hombre si se da una interposición, si puede haber una distancia. Haciendo uso de su inteligencia y de su voluntad, el hombre puede conocerse a sí mismo y el actuar que le corresponde, pero haciendo uso de esas mismas facultades puede decidir sí actuar como tal, o en algún modo comportarse de manera contraria a su naturaleza. Puede hacer uso de ese conocimiento de sí mismo para humanizarse más y desarrollar sus capacidades personales, como hombre los hombres y como mujeres las mujeres, y llevar a cumplimiento aquello que debe ser. Puede actuar de manera humana consigo mismo y con los demás o actuar de manera deshumana o, contradiciendo al ser que es, deshumanizándose, destruyéndose.

Por, otro lado, para quienes se empeñan en llamar a una especie de unión legal entre dos personas del mismo sexo; “matrimonio”, es bueno y oportuno aclarar que el significado semántico de la palabra matrimonio es el siguiente: ≤La palabra latina “matrimonium”, está compuesta de “mater”, “matris” = madre y “munium” = deberes, cargos, funciones, ocupaciones. Indica la función primordial de la madre como cuidadora de los hijos. La palabra latina “mater”>madre, lleva el lexema“ma”, perteneciente a una lengua más primitiva, la lengua indoeuropea, que se refiere a “madre”. La maternidad lleva en sí la acción natural de engendrar a través de la unión sexual de los esposos, del hombre y de la mujer, del marido y de la esposa, del varón y de la hembra≥.

Asimismo, es importante destacar que los hijos, ya sean propios o adoptados, tienen el DERECHO para su normal desarrollo psíquico-afectivo a crecer dentro de un hogar constituido por un padre, hombre, que haya desarrollado a plenitud su masculinidad y la represente y por una madre, mujer, que haya desarrollado a plenitud su feminidad y la encarne.

Con relación a la homosexualidad y al trato que se debe dar a los homosexuales, la iglesia en algunos de sus documentos nos exhorta a todos, comenzando por los obispos y sacerdotes, a acoger a quienes sufren una tendencia homosexual, considerada como objetivamente desordenada, a hacerles ver que es una tendencia desviada que en ningún momento puede ser moralmente aceptada, a ayudarles a afrontar su problema e invitarlos a vivir la castidad a la que estamos llamados todos aquellos que no hemos sido sacramentalmente unidos en matrimonio.

Igualmente la iglesia rechaza que a la persona se le considere solamente como un “heterosexual” o como un “homosexual” y subraya que cada uno tiene una identidad fundamental: ser creatura, y, por la gracia, hijo de Dios y heredero de la vida eterna[1].

Esther María Iannuzzo.

[1] CONGREGACIÓN PARA LA DOCTRINA DE LA FE, Carta a los obispos de la Iglesia Católica sobre la atención pastoral a las personas homosexuales, 1 de Octubre de 1986.

lunes, 24 de mayo de 2010

¿QUÉ ES LA DIAGNOSIS PRE-IMPLANTATORIA?, ¿ES LICITO ESTE PROCEDIMIENTO?


La diagnosis pre-implantatoria es una forma de diagnostico prenatal ligado a las técnicas de fecundación artificial. Es un procedimiento de diagnostico genético de los embriones (1) formados in vitro antes de ser transferidos al útero materno.

Este procedimiento es realizado con el objeto de tener la certeza de que los embriones que se transfieran a la madre esten libres de defectos o que sean de un determinado sexo, preferido por los padres, o que tengan ciertas características particulares. Este diagnostico, normalmente es seguido por la eliminación de aquél embrión "sospechoso" de algún defecto genético o cromosómico, o que no sea del sexo deseado por los padres.

El diagnostico pre-implantatorio es una practica abortiva precoz. El diagnostico pre-implantatorio es la expresión de una mentalidad eugenesica (2) que acepta el aborto selectivo para impedir el nacimiento de niños afectados de varios tipos de anomalías. Esta mentalidad es lesiva de la dignidad humana y es reprobable, puesto que, pretende medir el valor de una persona humana según parametros de normalidad y de bienestar físico, abriendo así el camino a el infanticio y la eutanasia.

Ambos procedimientos; la fecundación in vitro y el diagnostico pre-implantatorio son ilícitos porque ponen en riesgo la vida de muchos embriones.


Esther María Iannuzzo.


(1) Embrión (de la concepción a la octava semana).

(2) La eugenesia es una filosofía social que defiende la mejora de los rasgos hereditarios humanos mediante varias formas de intervención.


Cfr. CONGREGACIÓN PARA LA DOCTRINA DE LA FE, Instrución Dignitas Personae, sobre alguna questiones de Bioética, N. 22. Libreria Editrice Vaticana 2008.

María la Nueva Eva

Al principio de la creación Dios crea al hombre y a la mujer a imagen suya porque ésta es la imagen que luego tendrán el segundo Adan; Jesucristo y la segunda Eva; María.

Entre todas las creaturas que rodean a Adan él ve que ninguna se le parece, es por ello, que Dios crea a su compañera para que le sirva de ≤ayuda≥ y sea su complemento. Les da la misión de dominar la tierra y de escribir la historia de la humanidad.

Al comienzo de la historia humana Adan y Eva estaban juntos, uno al lado del otro y frente a Dios, con igual dignidad, libertad y responsabilidad. El pecado original altera el modo con el cual el hombre y la mujer acogen y viven la palabra de Dios y la relación con el creador. Es consecuencia del pecado que la relación hombre-mujer venga distorcionada y alejada del tipo de relación querida por el creador.

Las palabras de Dios a la mujer luego del pecado: "hacia tu marido irá tu instinto, pero él te dominará" (Gn 3,16) no se refieren a una amenaza o a un castigo de parte de Dios, sino a lo que realmente ocurriría, a la actitud de sometimiento que desde ese momento el hombre tendrá con ella y ella en cierto sentido se dejará someter.

Pero esta consecuencia del pecado original no sólo altera la relación hombre-mujer, sino que también altera el modo como la mujer comienza a verse a sí misma, el modo como se siente luego de verse sometida, su modo de actuar. Todo cambia en ese momento y ese cambio se hace sentir en la humanidad entera. Todos sufrimos las consecuencias de la herida causada por el pecado. Pero Dios nos ha enviado a un Salvador y a una redentora:

≤En el Hijo de Dios se recrea la "unidad" entre los dos" que era la condición querida por Dios desde el "principio". En Cristo se superan las consecuencias del pecado original, también en lo que se refiere al desequilibrio en la relación entre hombres y mujeres. Hay que recordar que este reequilibrio pasa también a través de una mujer, María, cuya figura es profetizada en el mismo momento de la toma de conciencia del pecado original y de las consecuencias devastantes, y esto parece permitirnos de resalir al estado precedente, de justicia originaria [...]. Dios asocia una mujer a la empresa de la redención, dándole un rol central que no por nada le ha valido el titulo de "Nueva Eva", nueva madre del género humano redimido y recreado por Cristo ≥ (1)

Del texto anterior se deduce claramente que mediante una intensa e intima relación con Dios y con María, la humanidad entera, y en este caso la mujer, puede recuperar el equilibrio y la dignidad perdida. Con esta dignidad recuperada ya no se dejará llevar por sus instintos, no se pondrá a disposición para ser sometida. Redescubrirá, amará y buscará crecer y madurar en su verdadera vocación de compañera y madre en lugar de querer escapar de ella, descuidarla y hasta abandonarla, lo que la hace sufrir aun más por querer ir en contra de su propia naturaleza, de lo que le es propio de acuerdo a sus caracteríticas de mujer.Buscará ocupar el lugar que le corresponde en los diferentes ámbitos en los que se desarrolle pero manteniendo sus propias características femeninas, no tomando las del hombre ni poniendose en contra de él queriéndolo destruir como si fuese un enemigo.

Al reencontrar la mujer su equilibrio inicial, ayudará también al hombre a encontrarlo y éste comenzará a verla de nuevo como a una compañera, como esa ≤ayuda≥ que le ha dado Dios al principio de la creación para que en su nombre dominaran la tierra y la poblaran. Ya no existirá la mujer dominada y el hombre que domina. Entre otras cosas, porque el hombre también sufre al subyugar a la mujer y privarse de tener una verdadera amistad con ella. Su corazón de hombre también anhela el compartir de igual a igual con su compañera.

Cuando el hombre causa la ofensa a la mujer dominándola, imponiéndose a ella de varias maneras, en realidad daña también su propia dignidad de ser humano masculino (2)

Esther María Iannuzzo.


(1) A.R. LUÑO, E. COLÓN, Teologia ed Etica Política, Libreria Editrice Vaticana 2005, 217.
(2) JUAN PABLO II, Catechesi sulla teologia del corpo, discurso del 30-07-1980.

COMPARTIENDO LA LUZ

¡Qué paz trae a nuestro corazón la seguridad de caminar por la vida en el camino correcto! ¡Cómo en este caminar de nuestra vida, el ejemplo de las personas deja una marca imborrable! Tantas y tantas experiencias en donde hemos visto y tocado con nuestras manos y corazón la bondad, la servicialidad, una muestra de cariño, un consejo, o la ayuda en un momento difícil de nuestra vida; estoy seguro que ese gesto no ha caído al vacío, no se ha perdido. Todos tenemos un importante papel que desempeñar, todos estamos llamados a ser luz, apoyo, guía de los demás; en definitiva, todos necesitamos de todos para llenar nuestra vida de la verdadera luz, la luz de Dios, que es la luz del amor y de la felicidad.
Un filósofo contó a sus discípulos la siguiente historia:

"Varios hombres habían quedado encerrados por error en una oscura caverna donde no podían ver casi nada. Pasó algún tiempo y uno de ellos logró encender una pequeña tea; pero la luz que daba era tan escasa, que aun así no se podía ver nada. Al hombre, sin embargo, se le ocurrió que con su luz podía ayudar a que cada uno de los demás prendiera su propia tea, y así, compartiendo la llama con todos, la caverna se iluminó".

Uno de sus discípulos preguntó: -¿qué nos enseña maestro este relato?

Y él contestó: -Nos enseña que nuestra luz sigue siendo oscuridad si no la compartimos con el prójimo. Y también nos dice que el compartir nuestra luz no la desvanece, sino que por el contrario, la hace crecer. El compartir nos enriquece en lugar de hacernos más pobres. Los momentos más felices son aquellos que hemos podido compartir".

Que Dios nos dé siempre la luz para iluminar a todos los que pasen por nuestro lado.

La verdadera amistad es flor, que se siembra con honestidad, se riega con afecto y crece a la luz de la comprensión. Si una vela enciende a otra, así pueden llegar a brillar miles de ellas. De igual modo, si iluminas tu corazón con amor, puede que ilumines a otro corazón. Mi deseo en este día para ti es: que sonrías, que seas amable, que te muestres interesado por las personas, y así, tu luz brillará y ésta hará que otra luz se encienda cerca de ti. Hoy nos toca a nosotros.

En los años que llevas de vida ¿a cuántos has iluminado?, ¿con quién has compartido tu luz? Espero que no te hayas cansado de seguir haciéndolo, porque lamentablemente los hombres somos así, nos cansamos.

Recuerda: Que tu luz, si no la compartes, seguirá siendo oscuridad; tu luz, nos diría Jesús, no es para que la escondas debajo de la cama o en el armario de tus egoísmos, es para que ella, uniéndose a todos los que queremos iluminar a este mundo, se sume a la gran antorcha humana, que en definitiva es el reflejo de Dios en el mundo.

Tú eres importante ¡y vaya que sí lo eres! y todos esperamos mucho de ti. Comparte hoy tu luz y verás ¡qué feliz serás!

P. Dennis Doren, L.C.


viernes, 14 de mayo de 2010

MARÍA LA ESCLAVA DEL SEÑOR


Yo soy la esclava del Señor;
hagáse en mí según tu palabra.
(Lc 1,38)


La iglesia ve en María la máxima expresión del "Genio femenino" y en cuentre en Ella una fuente de continua inspiración. [...] Poniéndose al servicio de Dios, ha estado también al servicio de los hombres: un servicio de amor. Precisamente este servicio le ha permitido realizar en su vida la experiencia de un misterioso, pero autentico ≤reinar≥. [...] ¡Su ≤reinar≥ es servir! ¡Su servir es ≤reinar≥!. (1)

Toda mujer por su condición de hija de Dios y por su vocación, al igual que María, es llamada a ≤reinar≥, mediante el servicio a Dios y a los demás; en e hogar como esposa y madre y fuera de él mediante el servicio a la iglesia y a la sociedad, estos dos útimos servicios también los realiza de manera indirecta dentro del hogar mediante la educación de los hijos que luego tendrá su incidencia significactiva dentro de la sociedad y en el crecimiento del Reino de Dios.

El hecho de que una mujer decida o no imitar la condición de esclava del Señor, asumida por María, tiene una gran incidencia dentro de la humanidad ya que contribuirá a llevarla por caminos del bien o del mal. Renunciar voluntariamente a las responsabilidades que nos exige cumplir nuestra vocación como mujeres es una grave omisión, es negarnos a llevar a cabo la misión para la cual Dios nos ha creado y las consecuencias de ello no se hacen esperar; tantas y tantas vidas desperdiciadas y arruinadas que caminan por caminos equivocados porque quienes tenían en sus manos la tarea de guiarlas y acompañarla por el camino justo mediante la palabra y el ejemplo, se negaron a cumplir con ella bien sea por ignorancia o por simple comodidad.

El ≤reinado≥ que el mundo muestra y propone a la mujer es muy diferente de aquel asumido a plenitud por la Madre de Dios. Para muchas mujeres hoy ≤reinar≥ no significa servir sino ser servidas, ser admiradas por su perfecta belleza, estar rodeada de objetos costosos, tener un sequito de personas a su disposición no para trabajar junto a ellas sino para que trabajen para ella, asumiendo el ≤reinar≥ un estar y sentirse por enciama de los demás. No es ser la compañera y el apoyo para el marido y la madre cuidadosa y amorosa de sus hijos, el realizar y realizarse en su verdadera vocación es para muchas mujeres una coerción a su libertad y un sacrificio enorme que no están dispuestas a asumir.


Esther María Iannuzzo.


(1) JUAN PABLO II, Carta a las mujeres N. 10.

Existe una doble moral a la hora de educar a los hijos en la sexualidad.

He sido testigo en algunas oportunidades de conversaciones sostenidas entre algunas madres con relación a su manera de “orientar” y de “guiar” a sus hijos en materia de sexo. Algunas de estas madres, lo son sólo de hijos varones, estas cuentan de manera muy animada: “ya le hablé a mis hijos del cuidado que hay que tener con el sexo y le he comprado los preservativos y se los he metido en la billetera”, este hecho es muy común.

En una ocasión una madre de tres varones contó que aprovechó un viaje con sus hijos para hablarles del sexo mientras iba en el carro con ellos, el contenido de la conversación era el siguiente: “les expliqué como se debe usar el condón y les dije que debían evitar el dejar embarazada a una muchacha porque la leche y los pañales estaban muy caros e iban a tener que ponerse a trabajar”. Esta madre lo decía con satisfacción y daba la impresión de que sentía que ya había cumplido con su deber.

En otra ocasión presencie otra conversación, en esta oportunidad se encontraban presentes tanto el padre como la madre, ellos tienen un varón y una hembra. La hembra debe ser respetada. A mi hija se le tiene que tratar con respeto. Pero dejaron claro que el hijo varón, que se encontraba presente, si se encontraba sexualmente activo y que se protegía con el reservativo, el padre mostraba satisfacción al decirlo.

Existe una doble moral a la hora de orientar a los hijos en lo que al sexo se refiere, y en esto, no solo el padre sino también la madre, en algunos casos, está de acuerdo. A ambos, hijo e hija, se les debe orientar de la misma manera, ambos poseen la misma dignidad y deben preservar la integridad de sus cuerpos hasta la hora de la entrega total y definitiva a su pareja luego de realizado el matrimonio. La iglesia católica nos enseña que: la castidad consiste en el dominio de sí mismos y de la propia sexualidad que debe estar ordenada según el designio divino a realizarse en el amor de los esposos y a trascender dentro de ese don mutuo del esposo y de la esposa en la generación de la vida de los hijos.

El ejercicio de la castidad conlleva a superar nuestros instintos y nuestras debilidades y para ello debemos antes comprender que no somos sólo cuerpo, sólo carne, que somos seres humanos dotados de alma, razón y voluntad y que lo que hagamos con nuestro cuerpo afecta a todo nuestro ser y tiene una incidencia importante en nuestra vida.

Nuestro cuerpo es depósito de nuestra alma, sagrario de Cristo y templo del Espíritu Santo. ≤El cuerpo constituye casi un signo sacramental. El cuerpo en su masculinidad y feminidad, es “desde el principio” llamado a convertirse en la manifestación del espíritu≥[1].

El valor sacramental del cuerpo impide su uso irrespetuoso y al abuso tanto de parte de la misma persona como por otros.

En algunos países se han creado grupos integrados por jóvenes que hacen juntos una promesa de castidad hasta llegada la hora del matrimonio. Juntos se apoyan unos a otros para cumplir su promesa. Esta es una iniciativa muy buena y que debe ser tomada como ejemplo.

Por otro lado es de destacar, para aquellos que creen que están seguros y protegidos y para los padres que creen que sus hijos están seguros y protegidos con el uso del preservativo, que éste no brinda una protección absoluta puesto que el virus del SIDA es muy pequeño y puede atravesar las paredes del preservativo, también puede haber contagio del VPH (Virus del Papiloma Humano) del cual están infestadas gran parte de las persona sexualmente activa, puesto que hay áreas que no son cubiertas por el preservativo y puede darse el contagio ya sea del hombre a la mujer o viceversa.

La mejor manera de librarse de enfermedades de transmisión sexual y de un embarazo fuera del matrimonio es la castidad. Los padres deberían formarse e informarse bien antes de hablar con sus hijos sobre el sexo y, si bien, para muchos padres les resulta muy difícil hablarles a sus hijos de la castidad, bien porque ellos mismos no están de acuerdo con esto o porque pueden tacharlos de anticuados, sin duda la castidad antes del matrimonio, es lo que corresponde a la dignidad e integridad del cuerpo de la persona soltera.

Esther María Iannuzzo.

[1] JUAN PABLO II, Catequesis, El cuerpo del hombre es un autentico valor, 22 octubre de 1980.

¡SACÚDETE Y SAL DEL POZO, PERO…!

Sacar provecho de las situaciones es de sabios y sensatos. Los golpes de la vida y las relaciones con los demás van marcando secuelas importantes en la vida; incluso, en ocasiones, llegan a ser hasta determinantes. Quisiéramos vencerlas, superarlas y hacer de ellas efectos positivos, y no esa carga tan pesada que muchas veces arrastramos. Cuántas veces hemos escuchado la frase “¡ay, cómo me tiran tierra!”, “¡vaya, cómo me llueve!”. Lamentablemente vivimos en un mundo de competencias, envidias y mientras más subimos más nos tiran. Dicen que los burros, sólo sirven para llevar carga, y como su nombre lo dice, son bien burros; pero hoy encontramos la historia de un burro diferente de los demás, este burro no es como cualquier burro, con orejas de burro y rabo de burro, éste sí supo cambiar el concepto que yo tenía de ellos.

Un día, el burro de un campesino se cayó en un pozo. El animal lloró fuertemente por horas, rebuznaba y rebuznaba mientras el campesino trataba de sacarlo sin éxito; finalmente, el campesino decidió que el animal ya estaba viejo, el pozo estaba seco y necesitaba ser tapado de todas formas, y que realmente no valía la pena sacar al burro. Invitó a todos sus vecinos para que vinieran a ayudarlo. Todos tomaron una pala y empezaron a tirar tierra al pozo. El burro se dio cuenta de lo que estaba pasando y lloró desconsoladamente, y se decía a sí mismo, esto me pasó por ser burro. Luego, para sorpresa de todos, se tranquilizó.

Después de unas cuantas paladas de tierra, el campesino finalmente miró al fondo del pozo y le sorprendió lo que vio... Con cada palada de tierra, el burro estaba haciendo algo increíble... Se sacudía la tierra y daba un paso hacia arriba...; mientras tanto, los vecinos seguían echando tierra encima del pobre animal, él se sacudía y daba un paso hacia arriba. Pronto todo el mundo vio sorprendido cómo el burro llegó hasta la boca del pozo, pasó por encima del borde y salió trotando... así, este gran animal le dio una buena lección a todos.

La vida va a tirarte tierra, todo tipo de tierra y tal vez tú mismo le tirarás tierra, no a la vida, pero sí a las personas. ¿En dónde me ubicaría yo?, ¿con quién me identificaría?, ¿con las personas que tiran tierra?, ¿con el burro que se abate y se deja vencer?, o ¿con el burro que aprovecha esa oportunidad y sale galopando como un percherón de fina estampa?

El truco y la dignidad de la persona están en respetar a los demás con sus cualidades y sus defectos, en sacudirse, salirse del pozo, dar un paso hacia arriba y ayudar a los demás a superarse, pero no a tirar tierra. Cada uno de nuestros problemas es un escalón hacia arriba; es una oportunidad para crecer, para vencer barreras y servirme de ellas, y ser un alma buena y caritativa.

Recordar las seis reglas para ser feliz:

1. Liberar el corazón del odio.
2. Liberar la mente de preocupaciones.
3. Vivir sencillamente.
4. Dar más.
5. Esperar menos.
6. Tener esperanza y demostrar a los demás que somos sabios y sensatos.

Disfruta la vida... ¡Sacúdete!


P. Dennis Doren, L.C


sábado, 8 de mayo de 2010

La intervención de María en las Bodas de Caná


≤La naturaleza femenina debe ser purificada y para ello es necesario tener presente el modelo de la Madre de Dios en las Bodas de Caná: como ella prevenir el embarazo antes de que sea notado, como ella intuir donde hay una necesidad, como ella ayudar sin hacerse notar. Una mujer que obra así, es como un espíritu bueno presente doquiera≥.
Edith Stein.

Lo ocurrido en las Bodas de Caná pone en evidencia la disponibilidad al servicio a los demás de María. Resalta también la fe y la confianza que ella tenía en su hijo y que lo indujo a Él a obrar su primer milagro. Ella sabía que Él podía realizar el milagro, confió y el milagro se realizó. Por otro lado, es de destacar que el primer milagro realizado por el Hijo de Dios en la tierra fue gracias a la intervención de una mujer, es cierto que era su madre, es cierto que se trataba de una mujer llena de fe, es cierto también que debió ser una petición hecha con firmeza pero revestida de humildad como correspondía a la que se había autodenominado “la esclava del Señor”, pero con esto seguramente Jesús también quería demostrar lo importante que para Él y para su padre era la mujer en general, en una época en la que no era valorada y sus palabras y sus peticiones no eran tomadas en cuenta, y lo importante que es y el poder de hacer que se obren milagros que ante Dios tienen la suplicas de una mujer perfecta como María.

Esther María Iannuzzo.

DICHOSOS LOS QUE SABEN VIVIR

Nuestra vida muchas veces va perdiendo el brillo. Los acontecimientos, las circunstancias, más que ayudarnos a crecer, en vez de ser oportunidades de maduración para nuestra persona, nos limitan, nos hacen sufrir y por lo tanto los rechazamos. Toma la vida con filosofía, aprende de ella y sácale el jugo, exprime de forma positiva todo lo que Dios permite y así serás una persona feliz y dichosa.

DICHOSOS los que saben reírse de sí mismos, porque no terminarán nunca de divertirse.

DICHOSOS los que saben distinguir una montaña de una piedra, porque se evitarán muchos inconvenientes.

DICHOSOS los que saben descansar y dormir sin buscarse excusas: llegarán a ser sabios.

DICHOSOS los que saben escuchar y callar: aprenderán cosas nuevas.

DICHOSOS los que son suficientemente inteligentes como para no tomarse en serio: serán apreciados por sus vecinos.

DICHOSOS los que están atentos a las exigencias de los demás, sin sentirse indispensables: serán fuente de alegría.

DICHOSOS ustedes cuando sepan mirar seriamente a las cosas pequeñas y tranquilamente a las cosas importantes: llegarán lejos en esta vida.

DICHOSOS ustedes cuando sepan apreciar una sonrisa y olvidar un desaire: vuestro camino estará lleno de sol.

DICHOSOS ustedes cuando sepan interpretar con benevolencia las actitudes de los demás, aún contra las apariencias: serán tomados por ingenuos, pero es el precio justo de la caridad.

DICHOSOS los que piensan antes de actuar y rezan antes de pensar: evitarán muchas tonterías.

DICHOSOS ustedes sobre todo cuando sepan reconocer al Señor en todo los que se encuentran: habrán logrado la verdadera luz y sabiduría.

Con estos consejos, Santo Tomás Moro nos da algunas pautas de cómo vivir nuestro breve paso por esta tierra llevando un mensaje, unas actitudes y un modo de ser algo diferente de lo que hoy nuestra sociedad contemporánea nos ofrece.

Marca tú la diferencia, y enséñanos con tu ejemplo a vivir...

P. Dennis Doren, L.C.