Balcón del Coliseo con vista a los Foros Romanos. |
Durante muchos años la mujer fue considerada políticamente incapaz, es a partir del siglo XX cuando en todos los países civilizados se comienzan a reconocer todos los derechos de la mujer como persona adulta en iguales condiciones que los hombres, cuando la mujer comienza a participar de forma activa en el mundo de la política.
Las mujeres poseen los mismos derechos a gobernar que los hombres, pero este derecho no lo debe ejercer como hombres sino como mujeres, es decir, aportando a ese “gobernar” todas las características y dones propios de la feminidad, eso que Juan Pablo II llamó “genio femenino”.
Para que ese gobernar sea justo, limpio y contribuya realmente a un mayor bien para todos, la mujer debe fundamentar su gobierno en la roca firma que es Dios, sí ella ha llegado a ocupar un puesto de envergadura política, es porque el mismo Dios así lo ha querido, ella no está allí para defender y promover sus propios intereses ni los de una minoría egoísta, ella ha llegado allí para defender los justos derechos e intereses de todos los ciudadanos que hacen vida dentro de su radio de acción.
Para que esto sea posible, debe ella practicar y promover todos los valores humanos, ella tiene el deber moral de actuar con ética, defender lo que es bueno y rechazar rigurosamente lo malo, lo que destruye a las personas y atenta contra la dignidad de estas.
Por sobretodo, debe defender la vida, la vida de cada persona desde su concepción hasta su muerte natural, Dios ha dotado a la mujer de características físicas y psicológicas que le permiten generar, acoger y proteger la vida, toda vida humana.
Defender el matrimonio entre un hombre y una mujer, todos los bienes y valores de la familia, apoyarla y fomentarla.
Promover y facilitar el acceso a la educación en los lugares y en los extractos sociales donde no existe o es casi nula. Sí es católica deberá practicar y fomentar los valores cristianos, sin que por ello deba entrar en conflictos y discusiones negativas con miembros de otras religiones.
Como mujer debe defender y promover el respeto a la mujer en todos los ámbitos, sí proclama y dice estar del lado de los derechos de la mujer tendrá que ser coherente y hacer lo que esté a su alcanzase para no permitir su abuso y explotación.
No promoverá el libertinaje sexual, el uso de anticonceptivos y abortivos, la aprobación de leyes a favor del aborto, del divorcio y a favor de las uniones homosexuales ni la adopción de niños por parte de estos. Podrá crear leyes que impidan el uso y la explotación del cuerpo de la mujer en los medios de comunicación social y en cualquier tipo de publicidad.
No promoverá el libertinaje sexual, el uso de anticonceptivos y abortivos, la aprobación de leyes a favor del aborto, del divorcio y a favor de las uniones homosexuales ni la adopción de niños por parte de estos. Podrá crear leyes que impidan el uso y la explotación del cuerpo de la mujer en los medios de comunicación social y en cualquier tipo de publicidad.
Las mujeres que poseen poder e influencia por ocupar puestos políticos pueden promover la paz y la resolución de conflictos sin la necesidad de recurrir y/o apoyar guerras que generan pobreza y destrucción para la gran mayoría de los implicados y riquezas (*) y poder para muy pocos. Siempre, y sobre todo en casos extremos, la mujer debería acudir a su habilidad para el dialogo pacifico y a su don para conciliar y reconciliar.
En fin, las mujeres en cargos políticos tienen en sus manos la capacidad de humanizar o deshumanizar a la sociedad a través de cada una de sus decisiones y de sus acciones.
Sí una mujer reconoce que tiene vocación y habilidades para ocupar cargos políticos que sepa que esa vocación y esas habilidades les vienen de Dios, a Él le pertenecen y ante Él deberá responder. Sí desempeña bien su labor la humanidad entera y el mismo Dios se lo agradecerán.
Esther María Iannuzzo.
(*) Los fabricantes de armas.
2 comentarios:
Esther:
Haces un valioso perfil de la mujer que deberia participar en el ambito de la politica, pero, para llevar a cabo esos ideales, deberia redearse de personas con valores cristianos.
Hermosa tu foto y tu escrito. Unidos en la oración.
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